miércoles, 8 de abril de 2009
Razón Para Olvidar
En el frío de una tarde otoñal
Las nubes hacen que el sol muera
Por el sendero de la limusina negra
Se arrastran los sirvientes de una obsesión
Los culpables victimizados por su propio corazón
Los creyentes y amantes llorando
Cabizbajos
Sin pies, deslizándose sin hacer crujir la hojarasca
Bajo un manto de lágrimas rojas
Los esqueletos danzantes se abrazan
Para el devenir de una noche proveniente de las mismas brazas
Restos, solo recuerdos insuficientes
Incapaces de llenar una presencia inexistente
Un lugar vacío, una pila de diarios devorada por el tiempo mismo
Puertas entreabiertas, relojes congelados
Muebles entre telarañas y ventanas con siluetas
Una sombra, un montón de pelusas
Una figura humana que ya no esta
No hay nada más triste,
No hay razón para olvidar.
ALEJANDRO SERRA© DERECHOS RESERVADOS