sábado, 31 de octubre de 2009
Cortos
Después de estar ausente mucho tiempo por cuestiones barias vuelvo a centrarme en el blog para mejorar mi forma de expresarme vía escrita ya que la practica y la insistencia es lo que da a lugar al progreso en este sentido.
Estoy creando una serie de mini poemas con una fuerte carga emocional, que directamente o indirectamente se basan en experiencias propias o de personas afines a mí. Espero que al leerlos se sientan identificados en cierto modo ya que muchas veces la personificación de los versos es lo que transforma a un curioso en lector.
Brisa
La suave caricia de la brisa nocturna
Se desliza sobre su rostro humedecido por lágrimas
Ni la misma instancia melancolía acaba con su día,
Que no más que un puñado de falsas sonrisas de consuelo recibió
No basta con ponerse en el lugar de otro si ni el sabio por esa vía transito
Las cosas cambian, nunca hay una justificación viva de lo que realmente paso
Pero sin más pleonasmo ni dramatización, una niña cubierta en un manto
Sentada en el muelle, sofocada en su llanto, con su vida acabo
La virgen del lago desde las cercanías la llamo:
“ven joven nombrada desgracia, ven a limpiar tu dolor,
En la noche en que las luciérnagas se apaguen, dejara de latir tu corazón”
Ya no hay victima, ni culpable sin apelación, la vida humana es efímera
Si no se logra comprender el sentido de los sentimientos sobre la razón
El sol seco el agua, y un cañaveral eterno en el lugar floreció,
Pues el arrepentimiento no pudo salvarla, pero si lo pudo el amor.
ALEJANDRO SERRA© DERECHOS RESERVADOS